Hace pocas semanas se llevó adelante el 20° Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros. Este encuentro (mal llamado "Internacional" por algunos sitios: es un ENCUENTRO, no una Internacional) es un espacio de debate y socialización entre los distintos PCs del mundo impulsado por el KKE (PArtido Comunista de Grecia) , uno de los pocos partidos que se mantienen en una férrea postura marxista.
Desde nuestro posicionamiento, la realización de estos encuentros es grata y enriquecedora pero mientras permanezcan con el actual formato no dejarán de ser cuestiones testimoniales.
En este contexto donde el Imperialismo se vuelve más agresivo para asegurar su supervivencia, donde el capitalismo recrudece su ataque a los trabajadores para mantener sus ganancias, y donde la más rancia derecha articula internacionalmente, el movimiento comunista no puede darse el lujo de continuar desperdigado y penetrado por el subjetivismo nacionalista como lo está hasta ahora.
Es una urgencia poner en pie los cimientos para la reconstrucción de la Kominern, de una III Internacional que recupere la identidad de sus primeros Congresos, que articule a todos los Partidos Comunistas como el Partido Mundial de la Clase Obrera. Claramente esto deberá respetar las necesidades y características propias de cada país de acción, pero todo coordinado en pos de la lucha revolucionaria mundial y no como estamos actualmente cada quien enfocado en la lucha parcial (o cuando mucho regional) contra el gobierno capitalista de turno.
Debemos restaurar una Internacional Comunista con vocación de poder, porque sólo la lucha por la Revolución Socialista puede ofrecer una alternativa a este mundo de miseria y opresión.
¡Necesitamos refundar la Komintern!
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