Esta mañana Evo anunció que llamará a nuevas elecciones tal como exige la OEA, ese "ministerio de colonias" como lo llamó con tanto acierto Fidel. A pesar de esta convocatoria, la derecha boliviana sigue convocando al ejército a intervenir en favor de crear un "gobierno transitorio".
Esta jornada será otra dura lección para los pueblos latinoamericanos. Por un lado, habrá que comprender que retroceder siempre o "dar un paso atrás" para "salvar la democracia (burguesa)" no suele funcionar, menos cuando ya está claro que hay un intento de golpe de estado sobre la mesa. Esto ya debería haber sido aprendido tras el golpe contra Allende. Por otra parte, tras más de una década de avanzar en un más que interesante proceso como es el caso boliviano (por más reformista que alguno pueda catalogarlo), resulta un grave problema no haber podido construir ni un solo cuadro que pueda suplantar a Evo. Tampoco es entendible cómo si el propio gobierno Boliviano sacó a la luz hace ya muchos años un documento de instrucciones para que la derecha boliviana pudiera construir contra Evo, no se hayan tomado cartas en el asunto.
Va a ser más que necesario aprender que "poder popular" no es mejorar un poquito el nivel de vida de la poblacion sin romper con la lógica capitalista -lo cual genera consumidores y no revolucionarios- sino que es construir un verdadero poder alternativo que pueda levantarse contra la burguesia en momentos como estos.
Mientras tanto, es necesario que gestemos una fuerte unidad latinoamericana en repudio al golpe de estado en proceso.
Solidaridad con el pueblo boliviano!
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