No pasó en los EEUU, así que a nadie parece impotarle pero el caso parece calco y copia. El policía le puso a rodilla encima del cuello y mientras el detenido repetía "no puedo respirar", el policía solo le respondia "no seas cagón".
Walter Nadal estaba sospechado de robo por lo que fue perseguido y detenido en pleno centro de San Miguel de Tucumán. La primera versión oficial dada por la policía fue que murió "de causas naturales", no obstante, las fotos y la autopsia dejaron en evidencia la mentira: Walter murió por asfixia.
Tantos días aplaudiendo al pueblo norteamericano y su decisión de combatir sin tregua, para que cuando nos llegue nuestra hora para movilizar contra la barbarie policial, nuestra sociedad se recluye y finge que nada pasó.
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