Algo que ocurre muy a menudo en nuestra sociedad -y los militantes no son excentos a este mal- es que hay "clásicos" cuyo contenido es más o menos conocido por el público general aún no habiendo leído los libros. Ocurre con Drácula, La Odisea, el Quijote, entre otros ejemplos, y la gente suele citar o hacer referencia a estos textos sin haberlos leido, pero aún así, teniendo una vaga noción de lo que están hablando. Son libros que están en la cultura popular, que han permeado al sentido común y son "obligada referencia" aunque muchos de quienes "los admiran" jamás vayan a leerlos.
Entre la militancia también existen estos textos "de obligada referencia" que no han sido leidos (o comprendidos al menos), pero que son utilizados para justificar rapidamente con una cita tal o cual postura.
En este caso, vamos a desnudar uno: "La enfermedad infantil del izquierdismo en el comunismo" de Vladimir Lenin.
Cada vez con mayor frecuencia se utiliza el título (y en general, sólo el título del libro) para descalificar rápidamente a todo aquel que no se quede de brazos cruzados aceptando el status quo, el pensamiento dominante y el reformismo disfrazado de "tácticas de coyuntura". Todos aquellos que osan alzar la voz para señalar que se toma un camino errado son rápidamente anulados con la mención de este libro, anulando así mágicamente todo argumento.
¿Qué pasaría si se enteran que "La enfermedad infantil del izquierdismo en el comunismo" tiene un apartado para resaltar que igual el principal enemigo del bolchevismo en el movimiento obrero es el oportunismo?
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